Con los años, la punción seca ha llegado a ser una técnica de tratamiento popular entre los fisioterapeutas. Para que la punción seca sea una modalidad terapéutica es importante conocer los criterios diagnósticos de un punto gatillo miofascial. Dichos criterios diagnósticos fueron descritos por «Travell y Simons» y los puedes encontrar en el apartado de dolor muscular
La punción seca es un tratamiento invasivo dentro de la fisioterapia. Consiste en la introducción de una aguja de acupuntura a través de la piel. Esta técnica es recomendable en pacientes que tienen una famosa “contractura”, puntos gatillo, síndrome de dolor miofascial, dolores musculares y sobrecargas musculares. La punción seca puede ser aplicada de forma superficial o profunda.
En la punción seca superficial se introduce la aguja atravesando la piel pero sin llegar a la “contractura”. Con esta modalidad lo que buscamos es la segregación de sustancias analgésicas producidas por el propio cuerpo.
En la punción seca profunda se introduce la aguja atravesando la piel hasta penetrar dentro de la “contractura”. Con esta modalidad lo que buscamos es potenciar la regeneración de tejido muscular nuevo.
El objetivo en fisioterapia, es decir, lo que queremos conseguir, es romper el círculo de retroalimentación neurofisiológica que mantiene activa la “contractura”, para así aliviar el dolor y mejorar la función del paciente. Esta técnica nada tiene que ver con la acupuntura aunque se utilice la misma aguja y cuenta con una evidencia clínica demostrada muy superior. Tampoco se introduce ningún tipo de sustancia (infiltración, anestésico, corticoide,…) Estas actuaciones quedan fuera del ámbito proprio del fisioterapeuta.