Lodaer Img

Codo de tenista y la infiltración

El codo de tenista afecta aproximadamente al 1-3% de la población general y a un 15% de trabajadores en industrias con riesgo de producir esta lesión  provocando una considerable morbilidad y coste económico.  La infiltración mediante corticoesteroides  ha sido utilizada desde 1950 y permanece en extenso uso, a pesar de que ésta es perjudicial a largo plazo.

«Coombes B. et al. 2013» mostró en su estudio que los pacientes que recibían una infiltración con corticoesteroides  tenían buenos resultados a corto plazo proporcionando alivio del dolor y mejorando la funcionalidad, con respecto al grupo control (grupo que no recibían ningún tratamiento).  Estos resultados se revertían a los 6 meses disminuyendo la gran o completa mejoría en el alivio del dolor, la discapacidad y la calidad de vida. Al año, la mayoría de los pacientes del grupo control en este estudio experimentaron una recuperación completa o mucha mejoría, lo que refleja la historia natural del codo de tenista.

Además, más de la mitad de los pacientes tratados con infiltración de corticoesteroides  experimentaron una recaída.  Ésta condición es debido a un efecto de la medicación inyectada.

Las bases de los efectos biológicos  de los corticoesteroides en la epicondilalgia lateral es aún largamente desconocida. Los corticoesteroides son  una medicación potente suprimiendo la inflamación, aunque no se ha evidenciado la presencia de inflamación aguda en las tendinopatías.  Por lo tanto, el beneficio obtenido a corto plazo para el paciente puede ser debido a un beneficio analgésico.

Las recaídas con la infiltración pueden ser debidas a que no se corrigen las características principales de la tendinopatía,  que van asociadas al sobreuso, a la acumulación de traumas y a la debilidad de las estructuras del tendón.

«Branson R. et al. 2010» mostró que en la última década emergieron nuevas terapias mediante infiltraciones, incluyendo infiltraciones con «agentes esclerosantes», «polidocanol» y factores de crecimiento derivados de la sangre.  Hay poca evidencia de calidad que apoye alguna de estas infiltraciones sobre cualquiera de las otras. Esto es debido, como hemos comentado antes, por la falta de entendimiento de la compleja fisiopatología del codo de tenista y/o los mecanismos  de acción de tales infiltraciones, incluyendo sus efectos en el tendón.

La conclusión de este estudio con respecto a la infiltración con corticoesteroides es el mismo que en el anterior estudio comentado. Mostrando una mejoría a corto plazo  y un empeoramiento al año. Las infiltraciones con «polidocadol» y factores de crecimiento derivados de la sangre a priori no parece mostrar más mejoría que la evolución natural de la epicondilalgía lateral sin aplicar ningún tratamiento.  Por lo tanto, ninguna de estas terapias parece estar soportada por la evidencia científica para su uso.

codo-de-tenista

 

«Coombes B. et al. 2013»  tenían la hipótesis de que combinando la infiltración mediante corticoesteroides y fisioterapia mantendrían la mejoría a largo plazo.  Sin embargo, encontraron que la fisioterapia combinada con la infiltración no corregía los  efectos adversos a largo plazo provocados por los corticoesteroides.  En cambio, sí comprobaron que la fisioterapia por si sola proporcionaba beneficios a corto plazo, reducía  las recurrencias y proporcionaba una mejoría completa al año.

«Bisset L. et al. 2006» identificó evidencia científica que mostraba efectos beneficiosos  de la manipulación del codo, mediante movilización con movimiento  y ejercicio.  El objetivo de este estudio era comparar los efectos a corto plazo y largo plazo de la fisioterapia comparada con la infiltración de corticoesteroides y el grupo control que no recibía ningún tratamiento.  Demostrando que la fisioterapia a corto plazo es mejor que ver y esperar, y superior que la infiltración a largo plazo.

En conclusión, con esta entrada en el blog «fisioterapeuta en Albacete» mostramos el apoyo de la evidencia científica hacia la fisioterapia como tratamiento único del codo de tenista, como ya comentamos en nuestra entrada anterior  «codo de tenista o epicondilalgía lateral« ).

Referencias bibliográficas

BransonR,NaiduK,duToitC,RotsteinAH,KissR,McMillan D, Fooks L, Coombes BK, Vicenzino B. Comparison of corticosteroid, autologous blood or sclerosant injections for chronic tennis elbow. Journal of Science and Medicine in Sport. 2016

Brooke K. Coombes,  Leanne Bisset,  Peter Brooks, Asad Khan, Bill Vicenzino. Effect of Corticosteroid Injection, Physiotherapy,  or Both on Clinical Outcomes in Patients With Unilateral Lateral Epicondylalgia:  A Randomized Controlled Trial.  JAMA.  2013;309(5):461-469

Leanne Bisset,Elaine Beller,Gwendolen Jull,Peter Brooks,Ross Darnell,Bill Vicenzino. Mobilisation with movement and exercise, corticosteroid injection, or wait and see for tennis elbow: randomised trial. BJM. 2006.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *