El dolor de cabeza es un síntoma muy común, con un considerable impacto social y económico. Es importante determinar si va asociado o no a otros factores. En función de ello, el dolor de cabeza se considerará como primario, si es el síntoma principal, o secundario, si es un síntoma causado por otra patología.
Dentro de los distintos tipos de dolor de cabeza o cefaleas, nos encontramos con tres que son los más frecuentes: cefalea tensional, migraña sin aura y cefalea de origen cervical.
La cefalea tensional
Es una cefalea primaria, que comúnmente presenta dolor de cabeza bilateral. Esta se caracteriza por una sensación de presión y tirantez de la cabeza, como si llevara un casco, una banda tirante o un peso en la cabeza, y una intensidad de dolor moderada, la cual dura desde unos minutos a días. El dolor en la cefalea tensional no empeora con las actividades rutinarias, como caminar o subir y bajar escaleras. Este tipo de cefaleas no está asociada con las náuseas, pero si puede presentar fotofobia o fonofobia.
La migraña
Es una cefalea primaria que se divide en dos tipos: migraña sin aura y la migraña con aura. La migraña es un dolor de cabeza recurrente, que se manifiesta en ataques que duran entre 4 y 72 horas. Los ataques son altamente variables en intensidad, frecuencia y duración. La migraña se caracteriza frecuentemente por dolor unilateral en la zona frontotemporal de la cabeza, aunque en algunos casos puede ser bilateral. El dolor tiene una caracteristica pulsatil, con náuseas y/o vómitos, asociados a fotofobia y fonofobia, y un empeoramiento con los movimientos de la cabeza o las actividades rutinarias durante la crisis.
La cefalea de origen cervical
Es una cefalea secundaria a un problema en la columna cervical. El dolor de cabeza suele ser unilateral, aunque a veces puede aparecer en los dos lados y esto por dos motivos: un aumento de la intensidad del dolor en el lado afecto que irradia hacia el otro lado de menor intensidad o a consecuencia de tener la misma lesión en los dos lados de la columna cervical. El dolor se percibe en el área suboccipital y/o en la región frontotemporal. El dolor de cabeza empeora con los movimientos del cuello, con la posición mantenida de la cabeza adelantada respecto al tronco o mediante una presión externa en la región posterior del cuello o la zona occipital.
A pesar de los conocimientos actuales de las distintas formas de dolor de cabeza, el diagnóstico diferencial puede presentar algunas dificultades. El problema es que los síntomas causados por los diferentes tipos de dolor de cabeza pueden solaparse con frecuencia. Además, también es común encontrarnos con pacientes que sufren dos o más formas de dolor de cabeza.
Hoy en día, no contamos con medidas objetivas, pruebas de imagen u otras pruebas de laboratorio que faciliten el diagnóstico diferencial. Por lo tanto, el diagnóstico diferencial se basa principalmente en la historia natural, el patrón temporal, la intensidad del dolor, la localización del dolor, los factores predisponentes, y los signos y síntomas asociados con el dolor como hemos comentado anteriormente.
El diagnóstico diferencial de las distintas formas de dolor de cabeza es crucial porque mientras hay evidencia de que la terapia manual y el ejercicio terapéutico aplicados por el fisioterapeuta son efectivos en la cefalea de origen cervical, no hay evidencias de tener buenos resultados en la migraña y en la cefalea tensional.
En la Clínica de Fisioterapia Pablo Laserna realizaremos un diagnóstico diferencial permitiéndole comprender qué le está sucediendo. Con las distintas técnicas de fisioterapia como la terapia manual y el ejercicio terapéutico le ayudaremos a mejorar su cefalea de origen cervical. También, mediante educación en dolor, comprendiendo los mecanismos que provocan la inhibición de los puntos gatillo (contracturas musculares) que generan su dolor de cabeza, le ayudaremos a disminuir la frecuencia y la intensidad de su cefalea tensional. La fisioterapia también puede ser de ayuda en caso de padecer migrañas mediante una compresión minuciosa de lo que le está sucediendo, realizando educación en dolor y una exposición gradual del paciente a las actividades que ha abandonado, siempre apoyado por el tratamiento médico.